martes, 13 de octubre de 2015

Judith Krieger y Manfred Korzilius - Gisa Klönne

Judith Krieger y Manfred Korzilius son policías del K11, la brigada de homicidios de Colonia, Alemania.

Judith nació en 1966. Cuando era pequeña sus padres cambiaban a menudo de ciudad. Al terminar el instituto decidió volver a Colonia para estudiar derecho.

La conocemos en 2005, con 39 años. Ojos grises con el borde turquesa, pecas, pelo rizado.
Vive en un ático en Maria-Hilf-Straße. Conduce un 2CV azul marino. Fuma, le gusta jugar a la petanca, la música de los 70: Patty Smith, Manfred Mann o Gianna Nannini y beber Kölsh (cerveza típica de Colonia).

Manfred Korzilius, Manni, tiene unos 30 años. Trabajó en delitos sexuales en Essen y más tarde en homicidios en Colonia.

Tiene el pelo rubio y largo hasta la barbilla. Viste zapatillas Nike y vaqueros desteñidos. Es adicto a las pastillas Fisherman's y conduce un GTI. Practica kárate y en casa golpea un saco de arena. Prefiere la cerveza de trigo.

Es un investigador incansable que sitúa el trabajo muy por encima de su vida personal.

En "Aguas heladas" Judith, de baja, investiga la desaparición de una antigua compañera de colegio y las pistas le llevarán de viaje a Canadá. Manni, trasladado a desaparecidos, se ocupa de la desaparición de un chaval y su perro que pasaban el fin de semana en un campamento indio. Mientras, se enfrenta, más mal que bien, a una relación conflictiva con su familia, especialmente con su padre.

Comentario personal

"Aguas heladas" me ha resultado aburrida y trivial. Ambos investigadores emprenden investigaciones paralelas sin mucho interés. El único hilo conductor quizás sea la reflexión, bastante superficial, sobre el maltrato infantil. El pasado y presente atormentado de ambos protagonistas no ha conseguido captar en absoluto mi atención.

En el apartado gastronómico Judith opta por ensaladas, sándwiches de atún y agua mineral. Durante su viaje a Canadá: mazorcas de maíz, ensalada Cesar, hamburguesas o espaguetis con marisco ahumado y pimentón. Manni come cualquier cosa por la calle, por ejemplo un gyros con zumo de manzana.


Libros de Judith Krieger y Manfred Korzilius
  1. Der Wald ist Schweigen: Judith Kriegers erster Fall. 2005
  2. Aguas heladas (Unter dem Eis: Judith Kriegers zweiter Fall, 2006)
  3. Una noche sin sombras (Nacht ohne Schatten: Judith Kriegers dritter Fall, 2008)
  4. Farben der Schuld: Judith Kriegers vierter Fall, 2009
  5. Nichts als Erlösung: Judith Kriegers fünfter Fall, 2011

La autora

Gisa Klönne nació en 1964 en Stuttgart, Alemania. Estudió literatura alemana y ciencias políticas, en Darmstadt, Alemania y la Universidad de Surrey, Guildford, Gran Bretaña. Realizó un master en Estudios de teatro, cine y televisión en la Universidad de Colonia. Trabajó como editora de varias revistas, antes de convertirse en periodista freelance. Tras publicar relatos policíacos, publica su primera novela en 2005.

Actualmente vive en Colonia con su marido.

Web de la autora: www.gisa-kloenne.de (en alemán e inglés)

Otros libros
  • Der grüne Engel, 2003
  • Im Dienst der Natur, 2003
  • Stehblues Revisited, 2003
  • Leise rieselt der Schnee, 2005
  • Rosenmontag mit Herbert. Kurzgeschichte in: Mords-Feste .
  • Das Lied der Stare nach dem Frost, 2013
  • Die Wahrscheinlichkeit des Glücks, 2014

3 comentarios:

Alice Silver dijo...

Comentarios de otras entradas:

patricia dijo...
Hola, os dejo aquí otra escritora, que para mi gusto es a tener muy en cuenta, Gisa Klönne, actualmente aquí hay publicados dos libros, Aguas Heladas, que me enganchó de principio a fin, y Una noche sin sombras (en la estantería a la espera), hasta el momento creo que ha publicado 4 novelas de la serie, con la inspectora Judith Krieger y su compañero Manni Korzilius, la trama se desarrolla en Colonia (Alemania)

13 de abril de 2011, 10:55

ferdi dijo...
En Gisa Klöne encontramos a una autora de densa escritura que rola como una ola, que arrasa lo que va dejando atrás. Gran parte de la novela transcurre entre dos historias paralelas sin unirlas, cruzándolas pero sin dejar huella. Te sujetas, intentas no dejarte arrastrar, pero finalmente no puedes resistirte, te zambulles, como un colimbo cualquiera, y terminas por admitir que es una buena historia y una buena escritora.
La otra novela tiene una escritura igualmente condensada pero su ritmo está retenido, como si las aguas estuvieran estancadas en un fango de miserias, como las cloacas de una sociedad podrida. Sus reflexiones sobre la utilización de las mujeres en la sociedad está a la altura de las mejores narraciones. Hará falta mucha lluvia, como la que cae desde hace una semana en Castellón, para poder lavar estas ancestrales miserias. Una gran novela.

22 de noviembre de 2011, 10:11

José maría dijo...

Hola Ferdi. a mí la Klone me resultó un tanto agobiante, tanto las historias como la protagonista, pero hay que reconocer que son novelas policíacas muy bien armadas...

22 de noviembre de 2011, 14:43

Javi (ex-anónimo) dijo...
Casualmente los comentarios de Ferdi y José María me han pillado finalizando "Aguas Heladas" de Gisa Klone, título que puede inducir al error porque no hay nieve ni avalanchas ni persecuciones por lagos helados. Todo lo contrario, está ambientada en pleno verano y bajo un calor agobiante en la ciudad de Colonia (con alguna desviación canadiense).
Sólo puedo decir que me parece magnífica, no solamente me ha enganchado la trama, sino la investigación, lenta, pausada, con escasez de recursos, aún cuando la situación exige premura velocidad y despliegue de medios.
Una descripción (creo yo) de un policía de verdad (me refiero al prota masculino, llamado Korzilius). De menos interés ha resultado la prota femenina (Krieger) traumatizada por algo que sucedió en el primer libro de la serie, no publicado en España.
Lo más impresionante es la constatación de que la violencia está a la vuelta de la esquina, y se crea desde el inicio, en el colegio.

Muy recomendable.

Besos y saludos

22 de noviembre de 2011, 16:43

CREUSSA dijo...
He leído "Aguas heladas", de Gisa Klönne. Como en general todos los nórdicos (aunque esta autora sea alemana), me ha resultado entretenido pero me suelen parecer clónicos. Muchos traumas infantiles, detectives protagonistas con los que no empatizo, siempre historias sórdidas, manera de narrar muy parecida, un poco asfixiante... Obviamente la novela policíaca no es "alegría-alegría", pero rara es la vez que no termino con ganas de pegarme un tiro cuando leo libros de esta zona de Europa.

3 de abril de 2013, 21:10

Adol dijo...

No la conocía, tampoco a la autora, tengo que leer más novela policíaca a nivel europeo que hay muchísima y conoces muchos títulos. Quizás esta novela sea un cambio en la trayectoria de la autora. Siempre suele aparecer alguna novela más floja que no es del gusto de todos y chafe el concepto que se tiene de una novela policíaca al uso. Saludos.

Alice Silver dijo...

No se Adol, como ves por otros comentarios hay gente que sí le ha gustado. A mi simplemente me ha parecido más de lo mismo, un clon como dice Creussa, sin nada en especial, no espero de la autora un cambio radical en nuevos libros... A nivel europeo o alemán hay cosas mucho mejores.