Sirvió en la RFA (Fuerzas Armadas de su Majestad) durante la I Guerra Mundial, luchó en Francia y obtuvo una condecoración por una acción de espionaje tras las líneas alemanas. En 1918 fue herido y pasó dos años convaleciendo de una crisis nerviosa. Durante estos años sufrió su primer desengaño amoroso, la mujer que amaba se casó estando él en el frente.
A los 30 años se instaló en un piso de Picadilly, en Londres, con su mayordomo Bunter. Con 32 comenzó su carrera detectivesca colaborando en la resolución del robo de las esmeraldas de Attenbury e investigando la acusación de asesinato de su hermano mayor, Gerald, actual duque de Denver. Su otra hermana, Mary, se casará con Charles Parket, un policía de Scothland Yard, con el que Wimsey colabora en algunos casos.
En "Veneno mortal" conoce a Harriet Vane. Graduada en Oxford con sobresaliente en inglés, es una mujer independiente, desgarbada y despistada, que escribe novelas policíacas y vive con un hombre sin casarse. Lord Peter se ocupará de aclarar el crimen del que la acusan. Harriet Vane es el alter-ego de la autora y a través de ella cuestionará en sus novelas el papel de la mujer universitaria, el matrimonio y las relaciones entre intelectuales. Lord Peter se enamora perdida y razonablemente de Harriet y le hará constantes proposiciones matrimoniales hasta que consiga llevarle al altar.
Peter Wimsey es un hombre mundano, divertido y gran conversador, que adora los libros y la música, los vinos y la gastronomía. Encarna al perfecto hombre de Oxford. Conoce los mejores restaurantes del Soho y West End y pequeñas hosterías de carretera con cocineros de fiar. Ya sea en un club de caballeros de Londres, en un pueblecito de Escocia o de la campiña inglesa, Lord Peter despliega su don de gentes, sus conocimientos enciclopédicos y su gran inteligencia para enfrentarse al crimen como a un sofisticado pasatiempo.
Le ayuda su mayordomo, Mervyn Bunter, que domina temas prácticos como la fotografía, hacer seguimientos o confirmar cuartadas con el servicio.
Para comer poca cosa, rosbeef frío y jamón dulce.
Novelas de Lord Peter Wimsey
- El cadáver con lentes (Whose Body?, 1923)
- Clouds of Witness, 1926
- Muerte natural (Unnatural Death, 1927)
- El misterio del Bellona Club (The Unpleasantness at the Bellona Club, 1928)
- Veneno mortal (Strong Poison, 1930)
- Cinco pistas falsas (Five Red Herrings, 1931)
- Un cadáver para Harriet Vane / El caso del bailarín barbudo (Have His Carcase, 1932)
- Muerte, agente de publicidad (Murder Must Advertise, 1933)
- Los nueve sastres / Nueves campanadas / Nueve campanas (The Nine Tailors, 1934)
- Los secretos de Oxford (Gaudy Night, 1935)
- Luna de miel / Luna de miel trágica (Busman's Honeymoon, 1937)
- Thrones, Dominations, 1998 - Terminado por Jill Paton Walsh en 1998. Esta autora también escribió "A Presumption of Death, 2003" donde narra la vida de la familia Wimsey durante la II Guerra Mundial.
Relatos cortos
- Lord Peter descubre el delito (Lord Peter Views the Body, 1928) - 12 relatos cortos
- Las vacaciones del verdugo (Hangman's Holiday, 1933) - contiene 4 relatos cortos de Lord Peter
- Con las pruebas en la boca (In the Teeth of the Evidence, 1939) - contiene 4 relatos cortos de Lord Peter
- Striding Folly, 1973 - relatos cortos publicados póstumamente
Películas
- The Silent Passenger, 1935. Reino Unido. Director: Reginald Denham. Intérprete: Peter Haddon (Lord Peter)
- Busman's Honeymoon, 1940. Reino Unido. Director: Arthur B. Woods. Guión: Dorothy L. Sayers, Muriel St. Clare, Monckton Hoffe. Intérpretes: Robert Montgomery (Lord Peter), Constance Cummings (Harriet Vane).
- Busman's Honeymoon, 1947. Reino Unido. Película para TV. Guión: Dorothy L. Sayers, Muriel St. Clare, John Glyn-Jones. Intérpretes: Harold Warrender (Lord Peter), Ruth Lodge (Harriet Vane).
- Busman's Honeymoon, 1957. Película para TV. Reino Unido. Director: Brandon Acton-Bond. Guión: Dorothy L. Sayers, Muriel St. Clare. Intérpretes: Peter Gray (Lord Peter), Sarah Lawson (Harriet Vane).
- Lord Peter Wimsey: Clouds of Witness, The Unpleasantness at the Bellona Club, Murder Must Advertise, The Nine Tailors, Five Red Herrings, 1972-1975. Miniseries para TV. Reino Unido. Intérprete: Ian Carmichael (Lord Peter).
- A Dorothy L. Sayers Mystery, 1987. Serie de TV. Reino Unido/EEUU. Directores: Christopher Hodson, Michael Simpson. Intérpretes: Edward Petherbridge (Lord Peter), Harriet Walter (Harriet Vane).
La autora
Dorothy Leigh Sayers nació en Oxford en 1893, fue hija única de un reverendo anglicano. A los cuatro años la familia se trasladó a un pueblo cerca de Cambridge. Fue una niña solitaria que estudió en casa, empezó a leer a los 4 años, aprendió francés con su institutriz y a los 7 años hablaba latín. A los 14 años ingresó en una escuela privada en Salisbury.
A los 18 años consiguió una beca para estudiar en el Somerville Collage de Oxford, una institución exclusivamente femenina, donde se graduó con honores en Lenguas Modernas en 1915. En 1916 publicó sus primeros poemas: Opus I. Entre 1916 y 1921 trabajó en una editorial en Oxford y en L’Ecole des Roches en Normandía. Se enamoró de un escritor ruso, pero él no quiso casarse. Entre 1922 y 1931 trabajó como copy en la firma Bensons en Londres.
En 1923 publicó su primera novela “Whose Body?” en la que presenta al personaje de Lord Peter Wimsey.
A los 31 años tuvo un hijo, John Anthony, que ocultó a su familia y entregó a una prima para que se ocupara de él. En 1926 se casó con Arthur Fleming, periodista, doce años mayor que ella, divorciado y con dos hijos. Al principio su relación fue bien pero con el tiempo se fue deteriorando. Su marido murió en 1950.
En 1930 crea el Detection Club junto con G.K. Chesterton y A. Christie, un club para establecer las reglas básicas de las novelas policiacas. Sería su presidente entre 1949 y 1957.
Desde 1931 se dedica completamente a la escritura. Escribió poesía, teatro, cartas, artículos, ensayos y dramas religiosos, obras para la radio. También tradujo al inglés la Divina Comedia de Dante y La Canción de Rolando. Fue amiga de C.S. Lewis y de otros miembros de los Inklings, con quienes compartía cierta nostalgia por el mundo del medievo.
Falleció de un ataque cardiaco en 1957.
Otras novelas policíacas
- The Documents in the Case, 1930 – Escrita con Robert Eustace
Escritas en colaboración de miembros del Detection Club:
- El almirante flotante (The Floating Admiral, 1931) - con Agatha Christie, Anthony Berkeley y G.K. Chesterton
- Ask a Policeman, 1933
- The Anatomy of Murder / More Anatomy of Murder, 1936
- Detection Medley, 1939
Dejo el comentario antes de leer la entrada:Gracias, Alice. Lord Peter es una de mis debilidades detectivescas.
ResponderEliminarVolveré a comentar tras la lectura.
Alice siento corregirte se trata de Dorothy L. Sayers como se puede leer en las portadas de los libros.
ResponderEliminarUn saludo
Lammermoor, te hacía de puente, me alegra que la hayas visto. Te la dedico por tu paciencia hasta que la he escrito y por el cariño con que siempre hablas de Lord Peter. A los demás os recomiendo la entrada del blog de Lammermoor ¿Y tu, de quién eres?.
ResponderEliminarTienes toda la razón José Ignacio, me equivoqué de apellido en el título y la etiqueta, ya lo he corregido. Gracias.
No sé qué es más interesante, si la vida del personaje o de la autora.
ResponderEliminarTodo lo que iba leyendo me iba recordando a A.Christie: La RAF, los colegios privados... y al final, resulta que pertenecían al mismo "club".
Me apunto a la autora para el plan infinito.
¡No hay manera! Es como la tercera o cuarta vez que intento dejar un comentario y se va de cabeza al cementerio de los comentarios perdidos. ¡A ver si ahora tengo más suerte!
ResponderEliminarVuelvo a contar que a Lord Peter lo descubrí en una novelita de la editorial Molino que había por casa –de las antiguas, de portada roja y negra y con dibujos en el interior. Me acuerdo de una de ellos: un cadáver con gafas dentro de una bañera. Uno de esos libros que no sabes por qué motivo se quedan grabados en tu memoria aunque no recordaba ni el título ni el personaje o la autora.
Bastante después lo redescubrí, cuando Lumen decidió publicar la colección Dorothy L.Sayers (un poco cara, por cierto). De momento, tengo El misterio del Bellona Club, Veneno Mortal, Cinco pistas falsas y Los nueve sastres –esta de otra editorial. Espero ir consiguiendo el resto de los libros.
Tengo debilidad manifiesta por Lord Peter y me encanta Bunters, su factótum, al que tiendo a relacionar con el Jeeves de Wodehouse. En cuanto a la autora, me sorprendió saber cuando leí Veneno Mortal que la trama de la novela estaba basada en su propia vida. (Estas escritoras inglesas fueron tremendamente transgresoras y sus vidas no son suficientemente conocidas o valoradas: desde Jane Austen ala propia Sayers)
Se suele mencionar a Agatha Christie como la reina del crimen; en mi opinión, deberíamos hablar de un trío de reinas: doña Agatha, Dorothy L.Sayers y P.D.James.
(Espero que este comentario no se autodestruya o me pondré a gritar como una loca)
Hola Alice
ResponderEliminarPensaba el otro día que tu eres nuestro detective favorito, investigas,buscas indicios, reunes y presentas, completas cuando hace falta, corriges..., después de tu entrada y la entusiasta respuesta de Lammermoor tendré que descubrir a esta mujer ;-)
Loque, a mi me llamó mucho la atención la biografía de la autora, sobre todo la incoherencia de dedicar gran parte de su vida a escribir obras religiosas y dejar abandonado a su hijo con una prima... En cuanto al ambientillo british, Of course!
ResponderEliminarLammermoor, en mi casa también había esas novelas de Molino rojas y negras, aunque eran todas de Agatha Christie. Supongo que la que mencionas es "Un cadáver con lentes". Yo he descubierto a Dorothy Sayers cuando Lumen empezó a reeditarla y he leído justo las obras que mencionas de Lumen y la otra editorial. Ahora estoy terminando "Los secretos de Oxford" y se me está haciendo un poco pesado. 600 páginas de "me caso, no me caso..." y ambiente universitario elitista. Es curioso descubrir en esta novela escrita en 1935 cierto paralelismo entre los pensamientos de algunos intelectuales de Oxford y las ideologías que se desarrollarían en la Alemania Nazi: eugenesia, esterilización...
Yo escribo los comentarios en word y luego los pego, así no los pierdo.
Maribel, me encanta ser vuestra detective favorita :). Los clásicos, sobre todo la parte biográfica, me dan mucho trabajo pues las fuentes son mucho más abundantes.
"Es curioso descubrir en esta novela escrita en 1935 cierto paralelismo entre los pensamientos de algunos intelectuales de Oxford y las ideologías que se desarrollarían en la Alemania Nazi: eugenesia, esterilización... "
ResponderEliminarInteresantísimo tema y no demasiado conocido, como dije en el blog de Homo Libris, hace poco vi un documental en el que hablaba sobre la Eugenesia y su difusión por varios países, por ejemplo: Estados Unidos y GB, y como se decía, lo peor es que realmente se creía que era una idea totalmente filantrópica.
Loque, supongo que leer este texto después de las novelas de Bernie Gunther ha hecho que me llamara más la atención.
ResponderEliminarHace tiempo me contaba un profesor de historia como estas ideologías estaban muy extendidas a principios de siglo por muchos países. Supongo que como la/s historia/s la escriben los vencedores "esconden" estos trapos sucios y otros tantos.
También hay mucho clasismo en estas novelas inglesas, y a una, que es de origen humilde, le duele :)
¿Solo a principios de siglo? Ahora también hay casos de "bancos de semen de genios" y cosas así. Quizás esté más camuflado.
ResponderEliminarEn cuanto al clasismo en las novelas, es que la sociedad inglesa era muy clasista. Si lo pensais un poco, también aparece ese clasismo en Agatha Christie (puede que de forma menos evidente en P.D. James) Y ¿recordais una serie inglesa que se llamaba Arriba y Abajo?
P.D: a pesar de todo ello -ya os digo que Lord Peter es un auténtico snob, reivindico al personaje.
También Elizabeth George muestra la diferencia de clases, pero en su caso, al hacerla evidente, la critica, no la da por supuesta. Claro que aunque sus novelas se desarrollen en Reino Unido, la autora nació en Ohio.
ResponderEliminarA mi también me cae simpático Lord Peter, en cierto modo es una caricatura de todo lo que representa.
No seguí Arriba y Abajo...
Yo sí veía Arriba y Abajo, pero hace tantos años que solo recuerdo algún detalle.
ResponderEliminarDesde luego en G.B. tenían un sistema más que de clases, de castas, como se ha visto (hasta la saciedad) en las películas de James Ivory.
Y sin salir de A.C. en una novela, cuyo nombre he querido olvidar, cuenta que la protagonista trabaja en una tienda y su jefa es una judía (y por lo tanto, tacaña y malísima)
Y no hace más que decir que si claro tiene esa nariz de los judíos, y que como es judía esto y aquello.
Es un párrafo que te pone los pelos de punta, porque te das cuenta de lo arraigado que estaba el antisemitismo, pero entre los aliados.
Y sin ir más lejos "El Mercader de Venecia", ya lo he dicho más veces, lo vi hace unos meses y es increíble el desprecio lo racista que puede llegar a ser, pero como lo escribió quién lo escribió, pues no pasa nada.
Hasta se oye que es una denuncia de la situación de los judíos y no sé qué. Sí, ya, una denuncia...
Yo quiero contar un caso, que no sé si es de una novela de esta autora.
ResponderEliminarDe adolescente, siempre iba a mi «bibloteca de cabecera» y recuerdo que leí una novela en la cual, si la memoria no me falla, todo transcurría en una casa, dentro de ella, en el salón. Y solo salieron de él en los capítulos finales.
Lo que no sé, es si fue en una novela de Dorothy (esto lo pienso, porque he buscado el recuerdo por el cual había un personaje que era el mayordomo y se llamaba irónicamente Butler —mayordomo en inglés—) o en alguna otra.
¿Alguien que haya leído toda su bibliografía puede decirme si es esto cierto o peco en el error?
Hola William Ernest,
ResponderEliminarLas que yo he leído: El misterio del Bellona's Club, Veneno mortal, Los nueve sastres y Los secretos de Oxford, no tienen el argumento que mencionas... que por otra parte es tan típico de la época que no te podría dar otras pistas, espero que alguien te pueda ayudar.
Quizá sea muy, muy tarde para responderle al amigo William Ernest, pero será que lo leí de pura casualidad y, como una revelación, creo saber de cuál obra de trata.
ResponderEliminarComo bien lo dijo Alice, la trama es típica -aunque yo diría tópica- de la edad de oro del género detectivesco. Sin embargo, John Dickson Carr tiene unas novelas donde participa Patrick Butler. En Wikipedia (en inglés) encontrarás más información y en qué novelas participa. Digo participa porque no es protagonista de ninguna, excepto de "Patrick Butler por la defensa", editada en el Séptimo Círculo, Emecé Argentina.
Un saludo.
Muchas gracias por aclarar el misterio Kirilok Myshkin, espero que William Ernest tenga ocasión de leerlo, ha pasado bastantes años desde su comentario.
ResponderEliminarHola Alice, estoy leyendo el cadaver con anteojos. No sé si debiera pero estoy muy impresionado por la forma que aparece el tema de lo judío. Y también el de las clases estos inglesess habían logrado una acumulación de reiquezas increíble. De todos modos supongo que los lectores de estas novelitas-novelazas serían básicamente pequeños burgueses volviendo a sus casa en tren o amas de casas esperando a que sus mariditos volvieran de la city en tren.
ResponderEliminarRecomiendo, aunque sea obvio, Lo que queda del día de Kazuo Ishiguro, que trata del final de aquel orden.
saludos y gracias por este lugar
Yo la leí hace tiempo niko y no recuerdo ningún comentario sobre los judíos... en cualquier caso no me extraña por la época, pecados que se le atribuyeron sólo a Alemania se daban en muchas otras sociedades...
ResponderEliminarDe Lo que queda del día sólo vi la peli hace muchos años, tendré que revisitarla.
En cuanto a los lectores de novela policíaca yo me imagino que tenía más penetración en distintas capas de la sociedad, al menos los autores clásicos como Conan Doyle o esta autora, una de las fundamentales de la edad de oro.
Estoy leyendo el tercer libro de la serie de Lord Wimsey, "Muerte natural". El original en inglés y la antigua edición de Molino de 1966. Me estoy acostumbrando a esa doble lectura y cada vez me alegro más. Porque la traducción española es lamentable.
ResponderEliminarEl traductor, un tal Ramón Margalef Llambrich, se permite eliminar todos los diálogos ingeniosos o irónicos entre Lord Wimsey y el policía Parker, una pareja especie Sherlock y Watson. También elimina las parrafadas de los testigos un tanto peculiares, sobre todo cuando utilizan una especie de jerga con la que la autora, supongo que por motivos humorísticos, intenta imitar sus acentos o, quizá, revelar sus origenes humildes e incorrecciones gramaticales.
Es como si considerara que al lector sólo le interesan los hechos puros, no la descripción de ambientes y personajes. Como es previsible, en la traducción española Wimsey y Parker parecen un par de bustos parlantes, sin el menor encanto.
En mi caso, el misterio y la resolución del mismo me importan más bien poco. Suelen ser totalmente artificiales y tramposos, como en la mayoría de las novelas de esta época. Pero la novela británica de entreguerras, sobre todo humorística, es mi debilidad, tanto que me enerva como diversos autores son profundamente machacados por este tipo de traducciones.
Me estoy planteando quemar en la hoguera toda mi colección de novelas de Molino y otras editoriales que tantas horas me llevó reunir en la Cuesta de Moyano o en busquedas en Iberlibro.
Y volver a leer autores que una vez rechacé por lo insulsos que me parecían. Incluso clásicos de la novela negra a los que nunca entendía. Posiblemente esas traducciones, particularmente las argentinas de Bruguera de los 60, tuvieran bastante culpa.
Pickwick, me ha resultado muy interesante tu comentario sobre el humor, las traducciones garrafales y tu deseo de quemar tu colección... ¡pero no las quemes, al menos las portadas de Molino eran preciosas!
ResponderEliminarEntiendo tu desesperación perfectamente, si a eso le añades la ilegibilidad a cuatro columnas de las de El Club del crimen me uno a ti en el deseo de pira...
Hola, Alice
ResponderEliminarMientras buscaba información bibliográfica me topé con la tesis doctoral de Carlos Abio Vilarig,llamada Políticas de Traducción y Censura en la Novela Negra Norteamericana Publicada en España durante la II República y la Dictadura Franquista(1931-1975)
Ahí el autor explica las razones de las omisiones o censuras en las novelas policiacas publicadas.
Su tesis se puede leer en Internet
Muchos libros no policiales tienen partes omitidas por capricho del editor -algunos muy pacatos-, por la censura o por razones X.
Espero que esto les ayude
Saludos
Gracias Black Arrow, me topé con la tesis de Carlos Abio hace muchos años, muy interesante, yo también la recomiendo.
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